Ensayo blower door: qué es y para qué sirve

En la búsqueda constante de la sostenibilidad en el sector de la construcción con el objetivo de reducir el consumo energético, la hermeticidad de la envolvente se ha convertido en uno de los factores más relevantes. La infiltración de aire no deseado tiene un impacto crítico en la eficiencia energética y el confort en el interior de los edificios. Por eso, para abordar este desafío, el ensayo Blower Door es una herramienta esencial.

Pero, ¿en qué consiste este ensayo y cómo se mide la estanqueidad de los edificios? A continuación, te contamos todo sobre la prueba blower door y su importancia en el proceso de aislamiento de viviendas y obtención de certificaciones energéticas como Passivhaus.

Qué es y cómo se mide la estanqueidad o hermeticidad de un edificio

La estanqueidad de un edificio, o también conocida comúnmente como hermeticidad, se refiere a la capacidad de la envolvente del edificio para evitar la infiltración de aire no deseado desde el exterior y la fuga desde el interior. Sin duda, es un factor fundamental que afecta directamente a aspectos como la eficiencia energética, el confort interior, la calidad del aire interior y la reducción del ruido.

Para medir la estanqueidad de un edificio, se pueden utilizar diferentes herramientas, como el test Blower Door, que se trata de un ensayo de hermeticidad que permite crear diferencias de presión controladas entre el interior y el exterior del edificio para cuantificar la cantidad de aire que se filtra a través de posibles fugas. En este sentido, la tasa de hermeticidad (n50) es la métrica que cuantifica las renovaciones por hora a la presión de 50 pascales y, cuanto más elevado sea el valor obtenido, menos hermético será el espacio.

Normativa aplicable a la permeabilidad de los edificios

La importancia de la estanqueidad de un edificio se ha reconocido a nivel normativo en muchos países. En España, por ejemplo, la normativa aplicable a la permeabilidad de los edificios se estableció en 2019 como parte del Código Técnico de la Edificación (CTE). De esta forma, se incorporó en la norma esta nueva condición para el control del consumo energético, contemplando tanto la envolvente del edificio en general, como los huecos de la envolvente.

El CTE exige niveles límite de hermeticidad para garantizar un rendimiento energético adecuado y mejorar la calidad de vida de los ocupantes. Esta normativa se aplica tanto a edificios de nueva construcción como a edificios existentes que se someten a reformas significativas.

En concreto, la tasa máxima establecida por la normativa española es de 3 y 6 renovaciones por hora en edificios de más de 120 metros cuadrados que se hayan construido o rehabilitado a partir de septiembre de 2020. El máximo de 3 renovaciones hace referencia a bloques de viviendas, mientras que el 6 a viviendas unifamiliares. Para obtener el certificado Passivhaus, este valor debe ser de, como máximo, 0,6 renovaciones de aire por hora.

Qué es el ensayo o test blower door

El ensayo de hermeticidad Blower Door, también conocido como prueba de puerta de aire, es una herramienta fundamental para evaluar la estanqueidad de un edificio.  

Esta prueba implica la instalación de un dispositivo de ventilación en una puerta o abertura del edificio, con el propósito de crear una diferencia de presión entre el interior y el exterior. Esta diferencia permite medir con precisión la cantidad de aire que entra o sale del edificio a una velocidad específica y, así, detectar fugas de aire para solucionarlas. Los resultados de esta prueba se utilizan para calcular la tasa de hermeticidad del inmueble, proporcionando una medida cuantitativa de este factor. 

Hay que tener en cuenta que el intercambio de aire entre interior y exterior, que puede producirse en puntos singulares o juntas, perjudica la estanqueidad y, por ende, la eficiencia energética. Por este motivo, el ensayo blower door permite detectar infiltraciones para alcanzar niveles de estanqueidad de aire que garanticen el ahorro energético. 

Cómo hacer un test blower door paso a paso

1. Preparación del edificio:
   • Cerrar todas las ventanas, puertas y otros puntos de entrada de aire al exterior, excepto la puerta donde se instalará el equipo.
   • Sellar temporalmente los extractores de aire, conductos de ventilación, y chimeneas para asegurar que sólo se mida la infiltración no controlada.
2. Instalación del equipo Blower Door:
   • Colocar el marco ajustable de la puerta Blower Door en una de las puertas exteriores principales.
   • Instalar el ventilador en el marco y sellar bien los bordes para evitar filtraciones alrededor del equipo.
   • Conectar los manómetros y otros instrumentos de medición al ventilador y calibrarlos según las instrucciones del fabricante.
3. Configuración de los parámetros del ensayo:
   • Configurar los parámetros de prueba en el controlador del ventilador, como la presión objetivo (por lo general, 50 Pa).
   • Configurar el equipo para medir tanto la presión interior como la exterior, asegurándose de que las sondas estén correctamente posicionadas.
4. Realización de la prueba de presión:
   • Encender el ventilador y comenzar a aumentar o disminuir la presión dentro del edificio hasta alcanzar el valor objetivo (50 Pa).
   • Registrar la diferencia de presión entre el interior y el exterior, junto con el flujo de aire necesario para mantener esa presión.
   • Realizar la prueba varias veces para asegurar la precisión de los resultados y promediar las lecturas obtenidas.
5. Detección de infiltraciones de aire:
   • Con la presión diferencial establecida, usar herramientas como cámaras termográficas, anemómetros o generadores de humo para identificar puntos de infiltración de aire en la envolvente del edificio.
   • Documentar las ubicaciones exactas de las fugas para futuras reparaciones o mejoras en la hermeticidad.
6. Interpretación de los resultados:
   • Calcular la tasa de infiltración de aire del edificio (normalmente expresada en ACH50, que es el número de renovaciones de aire por hora a 50 Pa).
   • Comparar los resultados con los estándares de eficiencia energética aplicables o los requisitos normativos locales.
   • El resultado conseguido compara la tasa de infiltraciones descubiertas con respecto al volumen interno del inmueble, obteniendo el valor del número de renovaciones por hora. 

Cuanto menor sea el valor de n50, mejor será la hermeticidad. Un valor bajo indica que hay menos infiltración de aire no deseado, lo que se traduce en un edificio más eficiente desde el punto de vista energético y con un mayor confort para sus ocupantes. Por el contrario, un valor alto, significa mayor aire filtrado y menor estanqueidad del espacio.

7. Elaboración del informe:

• Documentar todos los datos obtenidos durante el ensayo, incluidos los resultados de la tasa de infiltración y las ubicaciones de las fugas de aire.
• Incluir recomendaciones para mejorar la hermeticidad del edificio si es necesario.

La importancia de blower door en el proceso de obtención de un certificado passivhaus

El estándar Passivhaus es conocido por su enfoque en la máxima eficiencia energética y la comodidad interior. Además, también es una certificación demandada por beneficios como los ahorros energéticos significativos alcanzados a lo largo del tiempo, por el apoyo a la obtención de deducciones fiscales y por la revalorización del inmueble. En este sentido, te recomendamos este otro artículo si quieres saber los precios de las casas pasivas. Los edificios herméticos no solo ahorran en términos energéticos, sino que también se vuelven más atractivos para los compradores e inquilinos.  

Para obtener un certificado de casa pasiva, el edificio debe cumplir con estrictos requisitos de hermeticidad y eficiencia energética. El ensayo Blower Door es una herramienta fundamental en este proceso, ya que permite verificar que el edificio cumple con los estándares de hermeticidad requeridos. En la obtención del certificado Passivhaus, es preciso realizar esta prueba y que el resultado sea inferior a 0.6 renovaciones de aire por hora.  

Como hemos visto, el ensayo Blower Door es una herramienta esencial para evaluar la hermeticidad de un edificio y cumplir con los estándares de eficiencia energética. Su importancia radica en su contribución a la obtención de certificaciones energéticas, como el estándar Passivhaus, y en los beneficios económicos y de comodidad que proporciona a los propietarios de los edificios. 

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