Propiedades de los materiales aislantes térmicos
La elección adecuada de materiales aislantes térmicos es fundamental en el diseño y construcción de edificios eficientes y confortables. Estos materiales, esenciales en proyectos de sistema de aislamiento térmico por el exterior (SATE), juegan un papel crucial en la reducción de la demanda energética para la climatización, mejorando el bienestar de los ocupantes y minimizando el impacto ambiental de los edificios.
En este artículo, analizaremos las propiedades clave de los materiales aislantes térmicos, facilitando la elección de estos materiales según el clima, la ubicación geográfica y el tipo de construcción.
¿Qué son y qué contienen los materiales aislantes?
Los aislantes térmicos son materiales utilizados en la construcción para reducir el flujo de calor entre el interior y el exterior de una construcción, siendo un elemento clave en el confort interno de los edificios. Están compuestos por materiales con estructuras porosas o fibras que atrapan el aire o gases inertes, minimizando la transferencia de calor.
Estos materiales pueden ser orgánicos, inorgánicos o una combinación de ambos, y se seleccionan basándose en su capacidad para ofrecer resistencia térmica, durabilidad y compatibilidad con otros componentes constructivos.
Principales propiedades de los materiales aislantes a tener en cuenta en proyectos SATE
Al seleccionar el material aislante más adecuado para cada proyecto SATE, es vital conocer las propiedades de cada elemento. Estas propiedades determinan la eficacia del material en diferentes condiciones ambientales y constructivas.
Conductividad térmica (λ)
La conductividad térmica es una medida de la capacidad de un material para transmitir calor. Se expresa en watts por metro por kelvin (W/(m·K)).
Los materiales con baja conductividad térmica son mejores aislantes, ya que ofrecen mayor resistencia al paso del calor. La elección de materiales con baja conductividad térmica es esencial para maximizar la eficiencia energética del edificio.
Resistencia térmica (Rt)
La resistencia térmica indica la capacidad de un material para resistir el flujo de calor. Se mide en metros cuadrados kelvin por watt (m²K/W) y es el inverso de la conductividad térmica.
Un valor más alto de resistencia térmica significa mejor aislamiento, ya que el material impide más efectivamente el paso del calor.
Transmitancia térmica (U)
La transmitancia térmica mide la cantidad de calor que pasa a través de un material por unidad de área y diferencia de temperatura. Se expresa en W/(m²K).
Un valor bajo de transmitancia térmica indica un buen aislamiento, ya que menos calor se transfiere a través del material.
Factor de resistencia a la difusión del vapor de agua (μ)
El factor de resistencia a la difusión del vapor de agua representa la capacidad de un material para permitir el paso del vapor de agua. Es una medida sin unidades que compara la resistencia a la difusión de vapor de un material con la del aire.
Este factor es crucial para evitar problemas de condensación dentro de la envolvente del edificio y asegurar un ambiente interior saludable.
Calor específico (cp)
El calor específico es la cantidad de energía necesaria para aumentar la temperatura de una unidad de masa de un material en un grado Celsius (J/(kg·K)).
Materiales con un alto calor específico pueden absorber y almacenar una gran cantidad de calor, lo que contribuye a estabilizar las temperaturas interiores y reducir las cargas de climatización.
Densidad (ρ)
La densidad de un material aislante, medida en kilogramos por metro cúbico (kg/m³), influye en su capacidad de aislamiento térmico y acústico, así como en su resistencia estructural.
Materiales más densos generalmente ofrecen mejor aislamiento acústico, pero pueden no ser los mejores en términos de aislamiento térmico si su conductividad térmica es alta.
Propiedades ignífugas de los materiales aislantes térmicos de SATE
El DB SI – CTE establece requisitos específicos para garantizar la seguridad pasiva contra incendios de los edificios.
La clase de reacción al fuego establecida para fachadas debe ser:
- Para fachadas con altura hasta 10 metros, la clasificación debe ser D-s3,d0.
- Para fachadas con altura hasta 18 metros, la clasificación debe ser C-s3,d0.
- Y para fachadas con altura superior a 18 metros, la clasificación debe ser B-s3,d0.
La clasificación de reacción al fuego de cualquier variante del sistema SATE Rhonatherm supera el requisito más estricto establecido en el DB SI-CI, que es B-s3,d0.
Para más información consulta este artículo
Conocer detalladamente estas propiedades es fundamental para seleccionar los materiales aislantes térmicos más adecuados en proyectos SATE, garantizando el cumplimiento de los requisitos normativos, recogidos en España en el Código Técnico de la Edificación (CTE), así como también la consecución de edificios energéticamente eficientes, confortables y sostenibles.
La elección correcta del material aislante influye directamente en la calidad de vida de los ocupantes y en el rendimiento energético del edificio a lo largo de su vida útil, haciendo que el conocimiento de estas propiedades sea indispensable para aplicadores, arquitectos y propietarios.
En Rhonatherm contamos con diferentes materiales aislantes que componen nuestro sistema SATE, cada uno con sus características y propiedades únicas e indicados para el aislamiento térmico de edificios. Si necesitas más información o que te asesoremos, contacta con nosotros.
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